Al Oído: ¡Uribe no se defienda!, lo que unos pocos esperan

Uribe, el trampolín de siempre en elecciones

El caso del expresidente es la evidencia de cómo con algunos la vara con la que se mide es más dura que con otros, no sorprende que previo a elecciones siempre el tema del expresidente vuelve al ruedo.

Muchos se quejan del proceder de la Fiscalía y de los abogados del exmandatario, seguro prefieren que las decisiones de las instituciones sean las que ellos quieren y cuando no es así creen que son inferiores a su responder. Otros, pretenden que cuando se trata de Uribe no debería tener defensa, su odio los enceguece, pero él como todos tiene derecho al debido proceso.

Ahora bien, el testigo que gradúan de estrella es Monsalve, un hombre que se vende al mejor postor, que ha cambiado sus testimonios y que tenía quién sabe patrocinado por quién, beneficios en la cárcel. Muchos seguimos esperando que digan por qué el señor Iván Cepeda visitaba a Monsalve en su lugar de reclusión.

Mancuso lo que busca es la entrada a la JEP y no ha dicho nada nuevo, ¿y si tenía tanta verdad por qué no la dijo en Justicia y Paz?

Un ejemplo, la política en Medellín

Medellín, una como tantas ciudades que clama ahora sí un cambio porque el del alcalde Daniel Quintero solo fue en reversa que está saturada de cómo se sataniza a quienes piensen diferente y cómo se usa al expresidente Álvaro Uribe como único caballo de batalla.

Y es que no sorprende que la última encuesta haya evidenciado que el excandidato presidencial Federico Gutiérrez estaría casi que, en una carrera sin competencia, aún sin públicamente confirmar que sí va por la candidatura.

El alcalde Quintero resultó mejor promotor de artistas y eventos que administrador porque eso sí, para promocionar conciertos es el primero y también habló de los “artistas” que permitió que desde su gobierno sacaran provecho de hacer política y hoy estén ya como candidatos.

Pero es que desde el desayuno se sabe cómo será el almuerzo con todo, el señor mi tío en campaña inventando incluso el lugar donde vivía.

Y ahora junto a su manada hace política, con el que muchos hacen con el expresidente Álvaro Uribe, el mejor caballo de batalla para esos que pocas ideas tienen.