Fuerzas kurdosirias empezaron a retirarse del centro de ciudad clave del este de Siria
Hace dos días, la agrupación insurgente liderada por el Organismo de Liberación del Levante -exfilial siria de Al Qaeda que derrocó al régimen de Bachar al Asad- anunció que habían entrado en esa urbe.
Las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada liderada por kurdos, comenzaron este martes 10 de diciembre a retirarse del centro de la ciudad de Deir al Zur, en el noreste sirio y capital de la provincia homónima, informó a EFE el portavoz de la coalición, Farhad Shami.
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“Las fuerzas se retiraron del centro de la ciudad y se posicionaron en las afueras de la urbe adyacentes a nuestras zonas al este del río Éufrates”, indicó en una conversación telefónica.
Igualmente, Al Shami precisó que sus unidades siguen controlando algunas zonas de la localidad.
“En la ciudad hay Dáesh (grupo terrorista Estado Islámico) y seguidores del régimen que son parecidos al Dáesh”, indicó Al Shami, quien agregó que ese es el motivo por el que se han “replegado”.
“Ahora la situación es estable en la población”, dijo el portavoz de la alianza, respaldada por Estados Unidos, sin dar más detalles.
Hace dos días, la agrupación insurgente liderada por el Organismo de Liberación del Levante -exfilial siria de Al Qaeda que derrocó al régimen de Bachar al Asad- anunció que habían entrado en esa urbe.
El teniente coronel Hasan Abdelghani, que actúa como portavoz militar de la coalición insurgente, aseguró entonces que decenas de efectivos de las FSD se rindieron, mientras seguía avanzando en la provincia en su ofensiva contra los kurdosirios, otro frente iniciado durante la contienda contra Al Asad iniciada el pasado 27 de noviembre.
Las FSD informaron el pasado viernes de que sus unidades se habían desplegado en la ciudad de Deir al Zur, después de que el Ejército sirio y las milicias iraníes se retiraran de allí.
La alianza liderada por kurdosirios, y también integrada por árabes y asirios, señaló que la toma de control de la localidad se llevó a cabo para protegerla de “los grupos mercenarios afiliados a la ocupación turca”, en referencia a la coalición insurgente en la que se integran rebeldes respaldados por Ankara, así como por el temor a que la organización Estado Islámico se reagrupase y expandiese por su territorio.
Las FSD son enemigas de Turquía, aunque le han tendido la mano en estos últimos días para “resolver” de “forma pacífica” sus diferencias.