Francia Márquez alerta que teme por su vida por denunciar corrupción en Gobierno donde es copiloto
La radiografía del horror en el que se convirtió ser parte del gobierno del cambio.
Francia Márquez alerta que teme por su vida por denunciar corrupción en Gobierno donde es copiloto
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Gustavo Petro, Laura Sarabia y Francia Márquez. Foto: Colprensa.
La Casa ya no de Nariño, sino del terror
El escenario es escalofriante y aterrador, por eso exige que no se vuelva paisaje y que se enciendan como país las alarmas suficientes. En medio de un remezón ministerial, el país ha sido testigo de cómo mientras se recompone y prácticamente con bombos y platillos vuelven a lanzar un nuevo gabinete; otros funcionarios del Gobierno han alzado su voz para decir públicamente que temen por su vida.
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El director de la UNP fue uno de los primeros en encender las alarmas del riesgo que puede correr su vida; después vimos al ministro de Comercio, Luis Carlos Reyes, decir que la seguridad en este momento es más necesaria por la gravedad de lo que denunció, y los peces gordos a los que se enfrenta.
Lo último: de manera angustiosa, el día de ayer vimos a la vicepresidenta Francia Márquez denunciar, en una carta, que su vida corre peligro por denunciar corrupción del Gobierno del que ella hace parte, y ojo, es la copiloto de este vuelo que está en una turbulencia muy fuerte.
La pregunta que queda es ¿Qué clase de gobierno pretende sacar del juego a sus propios integrantes y de qué forma?
Resumen de los últimos días:
El presidente lanza el nuevo gabinete en un teatro, es decir que la función será un espectáculo para no perdernos.
La canciller envuelta en NUEVO escándalo y es el blanco de los enemigos que tiene en el gabinete. El director de la UNP, Augusto Rodríguez, fue salpicado por la canciller y este enciende las alarmas por su vida diciendo que está bien de salud y feliz de vivir.
El director del DPS exige la renuncia de la canciller Laura Sarabia.
Roy Barreras, el embajador, dice que pide examen médico de ministro de Comercio, Luis Carlos Reyes, y el ministro sugiere que el embajador tenía intereses en temas de contrabando. De remate, la esperanza es Armando Benedetti, quien aparte de ministro del Interior seguirá de jefe de Despacho.
Cerramos diciendo que pueden cambiar de gabinete cuantas veces quieran, pero el problema es de fondo, son engaños, secretos y la falta de líder. No es la base, es la cabeza.
