¿Se levantará la medida de racionamiento de agua en Bogotá? Esto dice la CAR Cundinamarca

Bogotá

Alfred Ballesteros, director de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), conversó con W Fin de Semana sobre la posibilidad de que se determinen plazos para el levantamiento de la medida de racionamiento de agua en Bogotá.

En primer lugar, Ballesteros informó que, en las últimas semanas, ha tenido lugar la transición hacia la primera temporada de lluvias del año 2025 que, según los pronósticos y predicciones del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), se va a consolidar en el mes de abril.

El funcionario también se refirió al estado de los embalses que surten de agua a la capital y sus alrededores: “Hemos tenido un comportamiento positivo y una leve mejoría en los embalses, pero no se nos puede olvidar que estamos extrayendo 17 m³ por segundo: eso es lo que consumimos los habitantes de Bogotá y la Sabana. En un día, eso representa cerca de 1.5 millones de m³”.

Esto significa, según Ballesteros, que “el día en el que llueve de manera intensa alcanzamos a compensar lo que extraemos de los embalses y ellos se mantienen estables o ligeramente en una curva ascendente”. Sin embargo, en los días en los que no llueve con intensidad, “los embalses vuelven a descender o algunos se mantienen estables”.

“Hoy tenemos el agregado norte en un 48% y el agregado sur en un 95%, pero son embalses muy pequeños. El sistema Chingaza (que surte el 80% del agua de Bogotá) se encuentra en un 39%”, precisó.

Para la autoridad ambiental, al hacer las modelaciones del posible ascenso de los embalses en los siguientes dos meses y medio de periodo de lluvias, se considera que los embalses pueden recuperarse levemente: “Podríamos sobrepasar el 50%”.

¿Se podría levantar el racionamiento de agua?

Para Ballesteros, es necesario guardar prudencia al momento de fijar plazos para el levantamiento de la medida de racionamiento de agua en Bogotá debido a que los embalses todavía no logran una recuperación que permita atender la demanda y, en su mayoría, mantienen una curva descendente.

“Consideramos que las empresas de servicios públicos deben mantener la prudencia y esperar a ver cómo se comportan las precipitaciones en las primeras semanas de abril antes de modificar los planes de contingencia como el racionamiento que se están implementando”, sostuvo.

Agregó que sería prudente esperar a que los sistemas de embalses estén sobre un 50% para hacer una evaluación de las medidas en función de los pronósticos y predicciones del Ideam y de las agencias internacionales como la NOAA, que brindan parámetros sobre las precipitaciones de los siguientes meses.

Sobre las lluvias, Ballesteros explicó que, a pesar de que está lloviendo de manera intensa en las zonas urbanas, no llueve con la misma intensidad en las microcuencas que abastecen los sistemas de embalses: “El sistema Chingaza depende mucho de las precipitaciones hacia la Orinoquía, cuyo régimen de lluvias se presenta a partir del mes de abril y hasta el mes de julio, aproximadamente”.

“No esperamos lluvias por encima de los promedios históricos de años anteriores, según los pronósticos del Ideam, la NOAA y nuestra información meteorológica. Por eso el llamado a la prudencia: todavía hay que esperar. Si esas precipitaciones superan los registros históricos de años anteriores, nos van a dar mucha tranquilidad (…) lo aconsejable es mantener las medidas hasta que los embalses lleguen a un 50% y los ciudadanos tienen que seguir contribuyendo con el ahorro”, indicó.

El funcionario recordó que se estaba en un promedio de 16 m³ por segundo, pero “empezó a llover y los ciudadanos aumentaron el consumo, por lo que ahora el promedio está sobre los 17 m³ por segundo”.

Esa es la razón por la que considera que no es posible relajar las medidas de ahorro en las industrias y en los hogares, pues “desafortunadamente la situación de los embalses y los ecosistemas todavía no es la que quisiéramos”.

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