¿Puede una mujer ser nombrada papa? Esto dice la Iglesia Católica

La idea de que una mujer pueda convertirse en papa ha despertado curiosidad y debate, especialmente en tiempos donde las discusiones sobre igualdad de género también tocan a las instituciones religiosas.

Sin embargo, de acuerdo con el derecho canónico de la Iglesia Católica, la respuesta es no: una mujer no puede ser elegida como papa.

¿Por qué no puede serlo?

El único requisito indispensable para ser elegido como sumo pontífice es ser un varón bautizado en la Iglesia Católica. No es necesario ser sacerdote, obispo o cardenal. De hecho, en teoría, cualquier hombre católico puede ser elegido, incluso si es un laico. Pero el requisito de ser varón es absoluto, y por eso, las mujeres están excluidas por norma.

¿Cómo es el proceso de elección?

La elección de un papa se realiza en el cónclave, donde los cardenales menores de 80 años se reúnen en la Capilla Sixtina. Allí, bajo la fórmula del “extra omnes*, quedan completamente aislados del mundo exterior hasta lograr una mayoría de dos tercios en la votación secreta.

Aunque se invoca la guía del Espíritu Santo, factores como la política interna, las alianzas y la trayectoria de los candidatos también influyen.

¿Han existido casos especiales?

Sí. Aunque es raro, ha habido papas que no eran cardenales ni obispos al momento de su elección. Uno de los casos más conocidos es el de Celestino V, un ermitaño que fue elegido en 1294 por aclamación. Aun así, incluso en estos casos excepcionales, todos los elegidos han sido hombres.

¿Podría cambiar esta norma en el futuro?

Hasta ahora, la Iglesia Católica mantiene una postura firme en cuanto al rol del varón dentro del sacerdocio y del liderazgo eclesial.

Dado que solo los hombres pueden ser ordenados como sacerdotes y obispos algo también estipulado por la doctrina y considerando que el papa es, ante todo, el obispo de Roma, la posibilidad de que una mujer llegue al papado sigue siendo canónicamente imposible.

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