Corte Suprema condena al exsenador José Ignacio Mesa de Cambio Radical por paramilitarismo
El congresista fue encontrado responsable de haber sostenido nexos con la Oficina de Envigado y las AUC con los que logró ser alcalde del municipio de Envigado, su fortín político, y Senadoren dos periodos.

José Ignacio Mesa. Foto: suministrada.
La Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia condenó, en primera instancia, a 6 años y 3 meses de prisión al exsenador antioqueño José Ignacio Mesa Betancur, del partido Cambio Radical, por nexos con el paramilitarismo y la “Oficina de Envigado”.
De acuerdo con lo probado por la magistratura, el excongresista y exalcalde de Envigado sostuvo nexos con esas estructuras armadas de los cuales se benefició para sus aspiraciones políticas, logrando llegar a ser alcalde de esa población vecina a Medellín (1995 - 1996) y además llegando al Congreso entre 1998 y 2006.
Para la Sala, declaraciones como las de Diego Fernando Murillo “Don Berna” y Juan Carlos Sierra “El Tuso” contaron con absoluta claridad. En ellas, dieron cuenta que Mesa Betancur fue un político adherido a la “Oficina de Envigado” quien de hecho era muy cercano a Gustavo Upegui, antiguo accionista del equipo de esa ciudad y señalado de ser socio de Pablo Escobar (Upegui fue asesinado en 2006).
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“Del caudal probatorio se pudo establecer que el procesado, con ánimo de permanencia, se adhirió a la organización “Oficina de Envigado” como apéndice de las Autodefensa Unidas de Colombia (AUC) a través de sus líderes Daniel Mejía Ángel y Gustavo Upegui, con la finalidad de obtener el apoyo económico y electoral que le permitiera alcanzar satisfactoriamente sus aspiraciones políticas” indica el fallo.
Incluso, ‘El Tuso’ Sierra testificó, en prueba que fue tomada por la Sala, que los nexos de Mesa Betancur comenzaron en 1994 cuando como comerciante de Envigado comenzó a financiar a los paramilitares luego de que “Don Berna” le expusiera el proyecto “político y militar”.
Asimismo, se pudo establecer, en primera instancia y según el criterio de la Corte, que la relación de José Ignacio Mesa con dichas estructuras criminales se transformó para ahora ser financiado para sus campañas políticas. Así lo expuso ‘El Tuso’ indicando que Daniel Mejía Ángel “Danielito” cabecilla de la “Oficina” por orden de “Berna” recogía fondos para aportarle a las campañas de Mesa.
‘Berna’, asimismo, en declaración ante la justicia señaló que la relación con José Ignacio Mesa Betancur se remonta a incluso épocas del Cartel de Medellín puesto que el padre del exsenador, Jorge Mesa, era según el exparamilitar, un reconocido socio de Pablo Escobar Gaviria.
Por cuenta de todo lo anterior, y la ausencia de “dubitación” alguna por parte de los declarantes, para la Corte “sin remisión a equívocos, Diego Fernando Murillo señaló a José Ignacio Mesa Betancur no sólo como hijo del exalcalde Jorge Mesa sino que también indicó que fue alcalde y muy amigo de Gustavo Upegui, quien como miembro importante e influyente en los temas políticos de la “Oficina de Envigado” lo apoyó en sus campañas políticas”.
Asimismo, en el marco del concierto para delinquir, para la Sala de Primera Instancia se encontró probado que el exsenador de Cambio Radical participó en un “contubernio” con sus aliados paramilitares para armar un falso secuestro de congresistas (que realmente eran parapolíticos como él), organizado por Carlos Castaño Gil, con el fin de presionar al gobierno y oponerse a la zona de despeje con las Farc. Dicho secuestro consistía en que se escondieran en una finca y simular que los “paras” los tenían detenidos.
Tales asuntos fueron corroborados por Diego Murillo Bejarano “Don Berna”, “El Tuso Sierra” y alias ‘El Pocho’ del Bloque Minero de las AUC y al contrario de esto, Mesa incurrió en bastantes contradicciones, de acuerdo con los magistrados.
“Sobre el particular, el procesado ha incurrido en insalvables incongruencias al referir en su versión libre que el secuestro se presentó cerca del parque de Envigado, cuando dos sujetos lo abordan (...) no obstante en la diligencia de indagatoria Mesa Betancur señaló unas circunstancias sustancialmente diversas a las precitadas” concluyó la Corte.
Además, en el marco de su labor como alcalde la Corte encontró relaciones contractuales con la esposa de su “promotor” Gustavo Upegui para la presunta compra de uniformes deportivos, y de hecho en el momento en que llegó a la alcaldía lo hizo con el 84% de los votos, cuando era, según el fallo, respaldado por los paramilitares. Asimismo, en el marco de su labor congresional también se planteó que puso su cargo al servicio de ese grupo criminal.
Así entonces, ante las incongruencias en sus declaraciones y las pruebas provenientes de altos mandos de dichas estructuras criminales que lo vincularon (las cuales fueron encontradas claras y delimitadas), para la Corte, en primera instancia, refulgió clara la relación “criminal” entre José Ignacio Mesa y las AUC-Oficina de Envigado.
“Los referentes probatorios analizados denotan que JOSE IGNACIO MESA BETANCUR conocía la ilegalidad de sus actos y le era exigible otra conducta, pese a ello, destino su voluntad al propósito delictivo del que da cuenta la actuación, a sabiendas de que con ello lesionaba la seguridad pública” concluyó la Sala de Primera Instancia.
Los magistrados no le concedieron ni la sustitución de la pena ni la detención domiciliaria, por lo cual, se tendría que expedir orden de captura contra el exsenador José Ignacio Mesa Betancur de quedar en firme la decisión. El excongresista podrá apelar el fallo ante la Sala de Casación Penal.