Reot madura con “No vuelvas”: rock latino, ansiedad y una mirada crítica a la vida moderna

En tiempos donde la industria musical muchas veces premia lo inmediato, lo superficial o lo repetido, la banda argentina Reot apuesta por todo lo contrario: un sonido denso, una narrativa cruda y una estética que se sumerge en el vértigo existencial de la era digital.

Así lo demuestra ‘No vuelvas’, su más reciente sencillo y carta de presentación del álbum Sin saber adónde voy, que será publicado el próximo 28 de mayo.

“No vuelvas es una canción que refleja un Reot más maduro”, explica Gonzalo Ansuati vocalista de la banda, durante una entrevista en W Radio.

“Venimos de un sonido más pop rock, más alegre quizá, pero ahora quisimos abordar temas más profundos: la ansiedad, el vacío, la depresión que muchos sentimos incluso estando rodeados de gente”, explicó Ansuati.

Y es que ‘No vuelvas’ no solo representa un giro temático en la trayectoria del grupo. También implica una consolidación de su identidad musical: una mezcla de influencias que van desde Van Halen y Guns N’ Roses hasta Soda Stereo y The Cure, todo pasado por el filtro de una sensibilidad contemporánea.

El resultado es lo que Ansuati define como “rock latam”, un sonido híbrido que se alimenta del ADN latinoamericano pero con proyección global.

“El riff de la canción lo trajo el guitarrista, como siempre”, cuenta el cantante. “Nos preguntan qué género hacemos y es difícil decirlo: es un clásico que suena en 2025. Traemos cosas de los ochenta y noventa, las bandas que escuchaban nuestros padres, y las llevamos al presente”.

El videoclip de ‘No vuelvas’ también rompe con los moldes tradicionales del género. Filmado en Buenos Aires con una SnorriCam —técnica audiovisual que mantiene la cámara fija al cuerpo del protagonista—, el clip ofrece un plano íntimo y casi claustrofóbico del personaje principal, interpretado por el guitarrista Nico. Es una representación visual de la angustia que transmite la letra: una sensación de encierro emocional en medio del caos urbano.

“Queríamos salirnos de lo típico. Ya hicimos videos con pantalla verde, con la banda tocando... ahora apostamos a un concepto más crudo, más directo”, dice Ansuati.

“Fueron tres horas caminando por el centro de Buenos Aires, la gente nos miraba raro, pero nos reímos mucho. Queríamos mostrar esa contradicción: estar rodeado de vida y sentirse solo”, explicó el cantante.

El disco completo, dividido en dos volúmenes, promete seguir esa misma línea crítica. El título Sin saber adónde voy resume el estado emocional de una generación enfrentada a la precariedad laboral, la presión social y la sobreestimulación constante.

Para Ansuati, hacer música en Argentina no solo es un desafío económico, sino también una lucha simbólica por mantener la voz activa.

“Muchos artistas acá tenemos que tener otro trabajo para sobrevivir. A veces la familia te dice ‘no va’, que mejor busques otra cosa. Este disco también habla de eso: de la presión de tener éxito, de la frustración de no llegar, de la búsqueda constante”, añadió.

A pesar del tono sombrío del nuevo material, Reot no pierde la esperanza. Más que caer en el lamento, la banda busca tender puentes con quienes atraviesan experiencias similares. “Queremos brindar soluciones desde la música, acompañar a los que están pasando por momentos difíciles”, concluye el vocalista.

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