Entre retrocesos y oportunidades: así se redefine el DEI en Colombia y el mundo

En los últimos años, la Diversidad, Equidad e Inclusión dejó de ser un simple valor corporativo para convertirse en una estrategia clave dentro de las organizaciones a nivel global. Sin embargo, el panorama actual muestra un punto de inflexión preocupante. En países como Estados Unidos y parte de Europa, se ha evidenciado un repliegue de estas políticas: empresas que reducen presupuestos, desarticulan áreas específicas o rebautizan programas para evitar una mayor exposición pública.

Este retroceso se debe, en parte, al avance de narrativas contrarias al DEI, a nuevas tensiones políticas y a cambios regulatorios que han puesto en tela de juicio sus fundamentos y resultados.

Aunque Colombia no ha adoptado restricciones similares, la influencia de estas dinámicas globales comienza a sentirse. En particular, las organizaciones multinacionales y sectores altamente expuestos al entorno internacional ya perciben una creciente presión: ¿cómo sostener sus compromisos con la diversidad sin verse atrapados en controversias o desgastes reputacionales?

La urgencia del tema se vuelve aún más evidente ante los desafíos estructurales que enfrenta el país. Por un lado, está la necesidad de integrar efectivamente a más de 2 millones de personas migrantes venezolanas, quienes representan un capital humano diverso, productivo y con alto potencial de aporte a las organizaciones. Por otro lado, persiste una deuda histórica con las comunidades afrodescendientes e indígenas, que siguen encontrando múltiples barreras para acceder a empleos de calidad, ocupar posiciones de liderazgo y tener una representación real en las estructuras organizacionales.

A esto se suma una creciente exigencia del entorno: conectar el discurso DEI con resultados medibles que no solo reflejan inclusión simbólica, sino impactos concretos en la competitividad, la innovación y la sostenibilidad empresarial. La necesidad de demostrar el valor estratégico del DEI más allá del cumplimiento reputacional es hoy más relevante que nunca.

En este contexto complejo y desafiante nace el proyecto El Poder de la Diversidad, un evento diseñado como espacio de conversación estratégica, reflexión profunda y construcción colectiva. Convocará a líderes empresariales, representantes del sector público, academia y voces de las poblaciones diversas, con el propósito de revisar el estado actual del DEI en Colombia, aprender de lo que está ocurriendo en otros mercados y construir rutas sostenibles de acción.

Este no será solo un foro sobre buenas intenciones. Será una oportunidad para pensar estratégicamente el futuro del DEI en Colombia, identificar riesgos reales, reconocer retrocesos globales y locales, y proyectar oportunidades sólidas que conecten diversidad con transformación empresarial.