Corte Suprema halló información falsa en reportes de gastos de campaña del Pacto Histórico al Senado
El alto tribunal expuso con pruebas que se habría incluido ilegalmente un contrato de vuelos dentro de los gastos a la campaña al Senado, el cual nunca fue usado por esa campaña, sino por la de la Presidencia.

Guillermo Jaramillo y Pacto Histórico | Foto: EFE
La Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, en un documento de 237 páginas, se abstuvo de iniciar investigación contra los 20 senadores del Pacto Histórico, por cuenta de las irregularidades que encontraron en la campaña de ese partido al Senado de la República, pero reveló que desde la campaña al Senado y pasando por la de la Presidencia, se le habría mentido al Consejo Nacional Electoral.
“A través de las averiguaciones realizadas en esta actuación se ha acreditado que el informe consolidado de ingresos y gastos de campaña de los candidatos al Senado de la República por la coalición Pacto Histórico, para el proceso electoral del 13 de marzo de 2022, y su registro en el aplicativo Cuentas Claras contiene información contraria a la realidad y, en consecuencia, falsa”, señala la decisión inhibitoria.
A pesar de estas irregularidades, la Sala decidió inhibirse de abrir investigación formal contra los congresistas, tras considerar que aunque debían suponer que certificar información falsa es un delito, su actuación habría sido de manera culposa, y los delitos de falsedad ideológica en documento privado y fraude procesal no están incluidos dentro de los delitos culposos.
La Corte determinó que estos firmaron confiando en la rectitud de los reportes de gastos de campaña, los cuales estaban en manos directamente del hoy ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, a quien confiaron aportar información clara y apegada a la realidad.
“Los elementos de juicio permiten colegir que los candidatos, en calidad de responsables de presentar los reportes financieros de la campaña ante la autoridad electoral, firmaron el documento sin conocer de sus inconsistencias, pues desconocian que el servicio de transporte aéreo cargado a su nombre no obedeció a un gasto de la campaña”, indica el documento.
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El florero de Llorente y nuevo “enredo” para las campañas del Pacto Histórico se relacionan con el contrato de “transporte” supuestamente para los candidatos al senado, suscrito por Guillermo Alfonso Jaramillo, como gerente de campaña al senado, con la empresa Sociedad de Transporte de Ibagué, por más de 1.200 millones de pesos.
Tal convenio, que ahora pone en aprietos al ministro y al presidente de Ecopetrol Ricardo Roa, gerente de la campaña Petro presidente, no habría sido utilizado de ninguna manera por los congresistas, quienes organizaban sus vuelos con recursos propios y otras maneras, pero sin recurrir a ese contrato, que les fue agregado para que lo reportaran de forma indebida a sus gastos en porciones de 60 millones de pesos cada uno, que sumados dan 1.200 millones de pesos, el monto del negocio.
El contrato y su valor habría sido incluido en los gastos de la campaña al senado, para evitar tener que reportarlo en la campaña a la presidencia y volarse los topes de gastos. Según la investigación del despacho del magistrado Misael Rodríguez, acompañada por la sala mayoritaria, tales vuelos habrían sido usados realmente por la campaña a la presidencia.
“En efecto, la mayoría de los investigados reconocieron que no realizaron desplazamientos en el transporte aéreo provisto por la Sociedad Aérea de Ibagué S.A.S. y refirieron, de igual modo, que desconocían qué personas usaron los vuelos o si esos servicios fueron utilizados por otras campañas políticas”, indica el auto inhibitorio.
Además, con tal información falsa, se habría girado asimismo un mayor número de dinero de reposición de votos para la campaña al Senado del Pacto Histórico.
“En esta actuación, las pruebas revelan que, con la presentación del informe que contiene información falsa, se habría inducido en error al Consejo Nacional Electoral para proferir los actos administrativos que reconocen el derecho a la reposición de gastos de campaña, en relación con los votos obtenidos por la lista cerrada al Senado de la República”, concluyó la Sala de Instrucción.
Así descubrió la Corte Suprema que los vuelos de ese contrato no fueron para los senadores, aunque se incluyó en sus gastos de campaña
En la determinación de 237 páginas, la Sala de Instrucción hizo un recuento de las pesquisas que los llevaron a descubrir que el contrato de transporte aéreo que la gerencia de campaña le endilgo a los congresistas, nunca fue usado por ellos, sino en realidad por la campaña del presidente Petro cuando estaba en consulta interna en febrero de 2022 y después en las etapas siguientes de campaña.
En primer lugar, la Corte encontró llamativo que el gerente de campaña Petro, Ricardo Roa, sugirió la contratación con la misma compañía, en lo atinente a la campaña al Senado. Asimismo, se habrían variado 62 horas de vuelo de la campaña Petro para pasarlos a la campaña al Senado.
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En tercer lugar, se evidenció que la información con la que se llenó las planillas de ese contrato pertenecía realmente a vuelos de la campaña Petro presidente, y los agendamientos y desplazamientos objeto del contrato fueron realizados por la coordinadora de la agenda, Laura Sarabia, excanciller de Colombia.
“En quinto lugar, ninguna persona en la campaña al Senado asumió la logística de organización de los vuelos contratados con la Sociedad Aérea de Ibagué S.A.S.; en contraposición, como ya se anotó, la coordinadora de la agenda del precandidato Gustavo Petro Urrego en la campaña de la consulta interna se encargó de manera decidida y consistente de la organización de vuelos, en los chats de gestión de información para cada desplazamiento aéreo”, detalló la Corte.
Pero además, la Sala expuso que se cambiaron facturas de vuelo inicialmente diligenciadas a nombre del gerente de campaña, Ricardo Roa, para que después terminara apareciendo Guillermo Alfonso Jaramillo como gerente de la campaña al Senado, y esconder los reales pasajeros e itinerario.
“La séptima corroboración se refiere a las personas que utilizaron efectivamente los vuelos, la mayoría de ellas son personas relacionadas por lazos familiares, laborales, de confianza o de seguridad al entonces precandidato Gustavo Petro Urrego o a actores relevantes de su campaña en la consulta interna”, destacó el alto tribunal.
Así entonces, en una dura conclusión, para la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, la campaña del Pacto Histórico al senado, y su gerente, Guillermo Alfonso Jaramillo, al parecer engañaron al Consejo Nacional Electoral, al incluir información dolosamente errónea en sus cuentas de gastos de campaña.